San Isidro Mamape
Historia de la Hacienda
San Isidro Mamape
EPOCA PATRONAL

Seda en plena republica aristocrática, siendo posiblemente su primer dueño Humberto BOGGIANO, abuelo de Lucila BOGGIANO (Sra. Mundo 1989) Fue quien construye la casa hacienda de dicha localidad, siendo de material rústico (adobe) y que consistía en dos piezas, un cuarto y un comedor.

En el año de 1948, el Sr. Humberto BOGGIANO vende la hacienda al Ing° Edgardo SEOANE CORRALES quien pasa desde ese momento a ser el nuevo propietario de la Hacienda Mamape, conduciéndola por 22 años (hasta setiembre de 1970).

Este hacendado amplia las casas de la ranchería tanto en la parte delantera como posterior, quedando conformada por una sala y comedor, jardín, dos cuartos, cocina, baño y corral tendiendo un aproximado de 50 metros de largo por 5 metros de ancho. En 1970, la entrega al estado voluntariamente, para que de esta manera sus trabajadores sean beneficiarios de la Ley de la Reforma Agraria D.L.17716 que fue promulgada por el General de Div. Juan VELASCO ALVARADO el 24 de Junio de 1969. Terminando de esa manera la época patronal.
CAMBIOS QUE SE DIERON CON
EL NUEVO PROPIETARIO DE LA HACIENDA
El Ing° Edgardo SEOANE CORRALES hizo mejoras en su propiedad con el propósito de que sus habitantes se sintieran cómodos a pesar de convivir en una zona rural. Entre las que destacan: Instaló el agua, desagüé, energía eléctrica, teléfono en la casa hacienda.
Mandó a construir un gran reservorio para abastecer de agua a los diversos cultivos que sembraban sus trabajadores, el mismo que también servía como fuente de recurso ictiológico y de vida silvestre, (patos lefes, gallaretas y otras aves). En él, construyó un pequeño muelle ya que tenía una lancha, que le servía para navegar en la época de verano. Por aquella época, los artefactos electrodomésticos solo lo adquirían los “pudientes”, por lo que compró un televisor para que sus trabajadores e hijos se distraigan en horas de la noche.
En Navidad entregaba juguetes, dulces y un desayuno consistente en té, chocolate con leche y panetón para los niños y para sus trabajadores les mataba un torete para que lo disfrutaran en Noche Buena. Por conversaciones con personas de la época, comentan que era una persona muy buena y católica haciéndoles participar de la misa dominical a sus trabajadores. Se dice que a todo aquel que llegaba a participar de ella, el Ingeniero le daba un sueldo aparte de lo ganado por su trabajo, a este sueldo le llamaba “salario familiar” teniendo en cuenta la cantidad de hijos.
Cabe recalcar que entre sus sembríos destacaban el arroz, la caña de azúcar, maíz y diversos productos de “pan llevar”. Mamape, fue la primera hacienda entregada a sus trabajadores por su propio dueño sin ningún tipo de violencia, como sí sucedió en otras haciendas de nuestro medio. Por eso años, sólo fueron 26 los beneficiados a quienes se les entregó las tierras.